Derrumbe de mina ilegal en Venezuela revela sentimiento de abandono de comunidades rurales
El colapso de una mina de oro explotada de forma ilegal en una zona remota del centro de Venezuela ha expuesto la sensación de abandono que sienten las comunidades pequeñas o rurales que se han quedado al margen del cuasirenacimiento económico de la capital, Caracas, y otras ciudades del país.
Los habitantes de La Paragua, la comunidad más próxima a Bulla Loca, una mina a cielo abierto donde en todo momento había docenas de hombres y mujeres trabajando, expresaron repetidamente el jueves su frustración con el gobierno al inicio de los funerales por algunas de las víctimas de la tragedia del martes.
Con al menos 16 fallecidos, el accidente es uno de los peores en la poco regulada industria minera venezolana, que repuntó en respuesta a la disminución de la producción de petróleo. Y la lenta respuesta gubernamental se sintió como un insulto a quienes durante años han ido de mina en mina buscando unos ingresos que no pueden encontrar en La Paragua.