Comunicación patológica: ¿sabes de qué se trata?
Al hablar de comunicación patológica estamos hablando de un tipo muy específico de comunicación y causa dosis importantes de sufrimiento en las personas que participan en ella.
Dentro de una comunicación patológica podemos hablar de términos como el gaslighting, en el que una persona es manipulada para que llegue a dudar de su propia percepción, juicio o memoria. Cuando alguien anuda y envuelve adrede una conversación para que pierdas el hilo, también estamos hablando de comunicación patológica.
La teoría de la comunicación humana de Watzlawick, Beavin y Jackson definió la comunicación a raíz de 4 pilares fundamentales:
Es imposible no comunicarse, siendo que es inherente a los seres vivos.
Toda comunicación tiene contenido y establece una relación entre los diferentes elementos y los comunicadores están de acuerdo en ambos conceptos.
Las secuencias de comunicación definen la naturaleza de una relación.
Los humanos se comunican tanto verbalmente como de forma no verbal y ambas formas son coherentes entre sí.
Así las cosas, la comunicación patológica consiste en enviar mensajes confusos a propósito o en darles un significado totalmente erróneo. Por caso, es sencillo hablar de comunicación patológica cuando se contradicen los axiomas antes mencionados.
Evitar comunicarse es imposible, pero incluso por momentos puede ser sano no querer hablar. En este caso, decir específicamente y claramente que no se quiere hablar puede ser sano y necesario.
Ahora, cuando esa negación a la comunicación se extiende sin tener fin o se comunica de maneras confusas y contradictorias, estamos hablando de comunicación patológica.
Cuando se trastoca el contenido y la relación, también estamos hablando de comunicación patológica, de igual manera que si se generan comportamientos contradictorios adrede para generar una falsa expectativa en la otra persona.