Musk se prepara para una guerra de Twitter contra Apple y Google
Elon Musk podría estar preparándose para una futura guerra con Apple y Google. El magnate sudafricano tiene grandes planes para su red social que, a pesar de los varapalos iniciales, pasan por el sistema de suscripciones para ‘independizarse’ de la dependencia de la publicidad y crear una red con menos moderación y más ‘libertad de expresión’. Estos planes están ya generando tensiones con las dos grandes marcas, que ya dudaban de la llegada de Musk por declaraciones contra sus políticas de publicidad en internet antes del asalto a Twitter.
La semana pasada, con la empresa ya algo más estabilizada, Elon Musk ya comenzó a cargar contra Apple en su red social. En un Tweet, el empresario afirmó que “Las tarifas que impone la tienda de aplicaciones son demasiado altas debido a un duopolio de iOS y Android”. El dueño de Tesla calificó esto como “un impuesto oculto del 30%”.
Elon Musk se refiere a la comisión que Apple y Google se llevan de entre el 15% y el 30% por las compras realizadas a través de la aplicación. Este sería un importante lastre para un Elon Musk que confía en que en un futuro próximo la mitad de su facturación (5.080 millones de dólares) venga de las suscripciones. En ese caso Twitter tendría que otorgar un 30% de esta cifra a Apple y Google.
Estas críticas no han sido las únicas en la cuenta de Elon Musk que, antes de adquirir Twitter, en julio de 2021 ya criticó a Apple por su conflicto contra EPIC, afirmando que “las tasas que impone la APP Store son de facto impuestos globales en internet, EPIC tiene razón”. El empresario se refiere al conflicto judicial entre la empresa creadora de Fortnite y Apple que acabó con un ’empate’.
La firma de videojuegos desafió a Twitter introduciendo un sistema de pago en su página web saltándose la tienda de Apple, que obligaba a usarla para comercializarse en sus dispositivos llevándose ella el 30% de comisión. Una medida que derivó en un conflicto judicial de posición dominante. Finalmente Apple ganó porque se le obligó a Epic a devolver el 30% de lo generado, pero el juez afirmó que Apple no podía prohibir a los desarrolladores la inclusión de métodos de pago alternativos.
Hasta ese momento la estrategia de Musk se encontraba con un importante escollo, que aunque lograse un sistema de suscripciones como uno de los pilares de su facturación (Twitter Blue), tendría que darle una cifra del negocio a Apple y Google. Sin embargo las palabras de Musk en Twitter apuntan a que podría buscar una solución parecida a la que ha tomado Netflix y llevarse su sistema de suscripción a una web externa para que sus 118 millones de suscriptores no pasen por la ventanilla de estas grandes tecnológicas.
Una decisión que desde los principales medios de Wall Street creen que daría lugar a una guerra judicial entre Musk y estas dos compañías. Michael Gurman, de Bloomberg, señalaba que “un escenario como que Twitter cobre de una web alternativa podría conducir a una batalla legal como la de Fortnite”.
Guerra por la moderación
Al margen de una guerra por la financiación, también hay tensiones crecientes por las políticas de ‘libertad de expresión’ de la nueva dirección de Twitter. Apple está muy comprometido en la moderación del contenido, no en vano en 2020 borró cerca de 30.000 aplicaciones de su tienda, además de casos polémicos como la red social conservadora Parler, borrada tras su auge después del asalto al congreso en Estados Unidos.
El ex director de seguridad Yoel Roth afirmó recientemente en una entrevista de New York Times que “las llamadas de los equipos de revisión de aplicaciones” con respecto a Twitter “ya habían comenzado cuando yo me dui (octubre) ante la posibilidad de que Musk fuera el propietario. Las tiendas de aplicaciones pueden eliminar aplicaciones de sus servicios, lo que sería “catastrófico” según Roth y figura entre los factores de riesgo para Twitter en el informe enviado a la SEC tras el acuerdo de compra. Que dentro de Apple hay tensión con Twitter respecto a sus contenidos se ha hecho público después de que algunas de sus principales personalidad hayan abandonado la red social. De hecho, lo ha dejado el propio Phil Schiller, director de la App Store.